Ya ha acabado el
verano, y después de pasar varios meses sufriendo el sol, el cloro y la sal, es
el momento de mimar nuestro pelo. La mejor forma es haciéndonos un tratamiento
casero de aceite de oliva que va genial para pelos teñidos o dañados o ambas
cosas.
Calienta medio
vaso de aceite de oliva en el microondas aproximadamente 30 segundos. Aplica el
aceite con cuidado de que no quema por tu pelo, insistiendo en puntas y medios.
Mejor evita la zona de las raíces, pero acércate mucho a ellas. Cubre tu
cabello con un gorro de baño y reposa el tiempo que necesites, mínimo media
hora y máximo una hora. Aclara el aceite con tu champú habitual y con
acondicionador (preferible a mascarilla) con agua fría o tibia. Y listo, tendrás
el pelo suave e hidratado como al principio del verano.
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